Nació en Ranchos, provincia de Buenos Aires en 1835 y falleció en 1863 en la ciudad de Buenos Aires. De padre y madre ingleses, cuando quedó huérfano, alrededor del año 1847, fue a radicarse a la ciudad de Liverpool, con su hermana. La salud de Enrique siempre fue muy frágil y por eso debió pasar temporadas en Escocia y Suiza. Sheridan se educó en colegios de Liverpool y sus alrededores, y es posible que allí también haya estudiado pintura, arte que ya dominaba a su regreso a la Argentina, en octubre de 1857. El diario La tribuna de la época define su obra como melancólica y profundamente sentida, salida del genio de Byron. Amigo y quizás discípulo de Juan León Palliere efectúan una exposición conjunta en 1859 en un local de la calle San Martín 126 de Buenos Aires. Fue fundador de una academia de artes en donde se dieron lecciones de pintura al óleo, acuarela y dibujo a lápiz. Sus obras de gran belleza y melancolía son extremadamente raras de conseguir, dado que el artista falleció contando con 27 años de edad. Cultivó preferentemente el género paisajista y costumbrista. Poseía sentido de la forma, sensibilidad cromática, visión amplia de la obra y buen gusto compositivo, que certifican sus aguadas, óleos y litografías.