Nació en 1924. Se crió en La Rioja, mudándose a Buenos Aires en 1941 y luego a Paris donde fue discípulo de Cándido Portinari. De regreso en Buenos Aires en 1952 fue profesor en la Academia de Bellas Artes. En 1953 pintó el mural Cristo en el Monte de los Olivos en la Iglesia Católica de Olivos. Vivió en Japón desde 1959 hasta 1961. Las experiencias vividas en esos años, lo llevaron definitivamente hacia la abstracción. Entre los premios que recibió podemos mencionar: Premio Palanza en Buenos Aires (1989) y la Condecoración “Caballero de Artes y Letras” de Francia. Falleció en París en el año 1995 mientras se desempeñaba como Embajador de la Argentina ante la UNESCO.