Nació en Godoy Cruz el 30 de abril de 1914 y murió en la misma ciudad el 27 de diciembre de 1995. Profesor de Dibujo y Pintura egresado de la Academia Provincial de Bellas Artes de Mendoza en 1941. Viajó por estudios artísticos por el norte argentino. Fue Secretario Técnico del Museo Emiliano Guiñazú, colaborador artístico en las páginas literarias del Diario Los Andes y socio fundador de la Sociedad de Artistas Plásticos de Mendoza. Presentó el proyecto de creación del Museo Municipal de Bellas Artes Fidel de Lucía en Parque Biritos. En sus inicios pintaba paisajes a plen air, en la zona de El Challao junto a los artistas Luis Basilio Rosas, José Bermúdez, Juan Scalco, Manuel Gil, Spartaco Romano, Antonio Castro, Rosario Moreno, León Ochoa y Encarnación di Blassi, bajo la guía de Roberto Azzoni. En Buenos Aires recorrió el postcubismo y la abstracción, en contacto con Spilimbergo, Berni y Pettoruti. Realizó 30 muestras individuales y participó en grupales en el Salón Nacional en 1958, VIII Salón de Cuyo, en galerías Giménez y d’Elía, IV Salón Bienal Municipal, IX, X y XI Salón de Cuyo y en San Rafael, Trienal de Valores Plásticos del Interior en Buenos Aires, y desde 1976 expuso permanente algunos años en México. Obtuvo la Medalla de la Comisión Nacional de Cultura en 1948, Premio Antonio Bravo en 1949, Premio de Pintura en 1953 y Segundo Premio en 1970 en el Salón Vendimia de Mendoza, Premio de Pintura en 1952 y Primer Premio en 1953, Primer Premio en 1960 y 1969 en el Salón Bienal Municipal de Mendoza, Gran Premio de Honor en el Salón Primavera de San Rafael en 1953, Segundo Premio en el Salón Primavera de Mendoza en 1958, Segundo Premio de Pintura en el Salón Regional Sarmiento de La Rioja, San Luis, Mendoza y San Juan en 1962 y Primer Premio de Pintura en la Quinta Feria del Libro de Mendoza en 1967. Su obra siempre destacó por la acentuada valoración colorística, siendo el color su mejor medio expresivo. Por el camino de la síntesis, recurre a veces a un cierto grado de abstracción, sin apartarse de lo figurativo. Atento al contorno, ubica lo propio en el paisaje, en la figura humana o animal, siempre recreando o procurando una imagen esencialmente pictórica y plástica en el sentido actual del arte. (Mendoza y su arte en la década del 50, de Marta Gómez de Rodríguez Britos, Mirta Scokin y Graciela Verdaguer, Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional de Cuyo, Mendoza).