Nació en Buenos Aires en 1899 y falleció en la misma provincia en 1970. Inició sus estudios de dibujo con Moretti y, en 1919, viajó a París para asistir al taller de Fernand Cormon. Teniendo a la capital francesa como epicentro, frecuentó distintas ciudades europeas para imbuirse de su ambiente artístico. En este sentido, el contacto con la obra de Gutiérrez Solana fue clave en su producción posterior. En 1934, retornó a Buenos Aires, pero cuatro años después fue nombrado Inspector de Arte por la Fundación del Gobierno Argentino en la Ciudad Universitaria de París, función que cumplió hasta 1940. Regresó, entonces, a la Argentina y ejerció la docencia tanto en instituciones de Educación Nacional como de forma particular. Fue, además, designado Vocal de la División de Artes Plásticas, Sección Escultura de la Comisión Honoraria de Bellas Artes de Buenos Aires. Se especializó en la pintura de género retratista y religioso. La mayor parte de su trabajo iconográfico estuvo basado en el Nuevo Testamento, si bien no excluyó las temáticas mitológicas. Concurrió al Salón Nacional, en 1918, 1938 y 1940; la Galería Jean Charpentier de París, en 1927, y la Cámara de Comercio Argentino Francesa de París, en 1931. También expuso en Galería Witcomb, Galería Vetmas, Galería Hampton y en el Centro Cultural Dock del Plata, entre otros espacios. Obtuvo importantes distinciones como el Tercer Premio de Pintura en el Salón Nacional.