Rodolfo Krasnopolsky, llamado Krasno como seudónimo artístico, nació en Chivilcoy el 27 de agosto de 1926 y falleció en Villebon Sur Yvette, Francia, en 1982. Pintor, escultor y grabador, inició sus estudios en plástica con Aurora de Pietro de Torras en General Belgrano, provincia de Buenos Aires. Prosiguió su formación en la Escuela Nacional de Bellas Artes egresando con el título de Profesor Nacional de Dibujo en 1949. En 1960, viajó a Europa y, en 1961, se radicó en París. Concurrió al Salón Nacional de 1952 a 1954 y en 1956, 1957 y 1959. En 1960, viajó a Holanda gracias a una beca otorgada por ese país y, luego, se estableció en París. Dentro de sus trabajos, se caracterizó por sus “Neograbados”, que son relieves de papel ejecutados sobre la base de esculturas, y por su serie de “huevos de Neofósiles”, objetos-esculturas realizados en cartón piedra. Ejerció la docencia en la Escuela Nacional de Bellas Artes y actuó como jurado artístico. Entre las numerosas muestras realizadas, expuso en la Bienal de La Habana; la Exposición Universal de Bruselas; la Primera Bienal de París; Cien Años de Pintura Argentina en Madrid, Santiago de Chile y Montevideo, en 1960; Pintura Argentina en Río de Janeiro, en 1961; la Biblioteca Nacional de París, en 1971. Obtuvo el Premio de Ridder del Instituto de Arte Moderno de Buenos Aires, en 1950; el Primer Premio Municipal de Morón, en 1951; la Mención Honorífica en el Salón Nacional, en 1953; el Premio Estímulo en el Salón de Arte de Buenos Aires, en 1956; el Primer Premio en el Salón Nacional, en 1962; el Gran Premio de Honor en el Salón de Santa Fe, en 1964; y el Primer Premio Lino Spilimbergo, en 1964.