Nació en Buenos Aires en 1939. Estudió pintura con Eufemiano Sánchez y Leopoldo Presas. Desde 1965 participa en muestras individuales y colectivas en Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Estados Unidos, Finlandia, Holanda, Italia, Japón y Uruguay. Obtuvo el Primer Premio en el Salón de la Sociedad Hebraica Argentina para Pintores Jóvenes en 1966, Beca Francesco Romero otorgada por la Embajada de Italia en Argentina en 1978, en 1997 Beca Pollock Krasner Foundation, en 1966 Primera Mención en el Premio Braque de 1966, Primer Premio de la Bienal de Valparaíso, Chile. Primer Premio en el Salón Nacional y Primer Premio de Boca Cien años. Después de desarrollar obras casi abstractas, que le valieron el premio de la Sociedad Hebraica Argentina, Silvina incursionó en la creación de los objetos, verdaderos antecedentes de sus retratos. Un bestiario con lúcida imaginación puebla sus retratos grotescos humorísticos. Más que un surrealismo a la moda, sus pinturas exhalan metáforas narrativas. Lo mordaz y lo grotesco: dos de sus leit motivs creativos, y que alternaban con formas insólitas y candorosas. (Jorge Glusberg; Panorama de la Pintura Argentina Contemporánea de Galería Jutta Wiegert, Buenos Aires, 1991; http://www.arte-online.net/Notas/Silvina_Benguria2)